www.todoliteratura.es
¿Es necesario tener un título universitario para ser escritor?
¿Es necesario tener un título universitario para ser escritor?

¿Es necesario tener un título universitario para ser escritor?

Por Evaristo Aguado
martes 29 de septiembre de 2020, 18:31h

Aunque hay algunos genios que nacen con el talento y sólo lo desarrollan conforme pasan los años, la mayoría de los buenos escritores se han hecho a sí mismos, a costa de mucho estudio y práctica. Por ello, la duda de si es necesario tener un título universitario no tardará en aparecer.

Ser escritor es una de la actividades más apasionantes que pueden existir en todo el mundo. Una actividad solitaria, enigmática y poderosa, capaz de transformar el mundo y la mente de los lectores, todo al mismo tiempo.

Pero para lograrlo es necesario tener los conocimientos, la preparación y la maña de un escritor. No basta con dominar el lenguaje y la ortografía perfecta, ya que la comunicación de las ideas y la escritura de los sentimientos, así como también la construcción de personajes y estructuras literarias, lleva tiempo, práctica, esfuerzo y, por qué no, una formación específica para acortar el camino hacia el deseo de ser profesional y vivir de la escritura.


¿Qué debes estudiar si quieres ser escritor?

Aunque la práctica hace al maestro, es innegable la importancia de la formación y los recursos de conocimiento a los que puedas tener acceso, ya que serán los que fomentarán tu interés por el arte y, en el proceso, te transformarán en un escritor de mayores dotes, con menos errores y con una solidez sin precedentes, permitiéndote también ser más prolífico en la creación de proyectos de escritura.

No negar la importancia de la formación universitaria

Si bien es cierto que en el idioma español, en ninguno de los países hispanoamericanos existe una titulación oficial para la escritura como sí existe en Inglaterra por ejemplo, sí es cierto que muchas carreras universitarias brindan incalculables recursos y metodologías que serán de utilidad para el desarrollo de una profesión como escritor.

Sucede así con grados como los de lengua española, filología, filosofía, historia, psicología, cine -sobre todo si te interesa la creación de guiones- y también comunicación y periodismo, siendo esta última una de las preferidas por los nóveles escritores, sobre todo por la influencia de periodistas que luego han sido escritores de referencia, como el caso de Gabriel García Márquez, Arturo Pérez-Reverte, Carlos Fuentes o Mario Vargas Llosa.

La formación académica, además, podría abrirte las puertas a concursos, editoriales o acceder a propuestas que sin ella no serían posibles. Tal vez por esta razón, algunos escritores, sobre todo teniendo ya desarrollados algunos proyectos en el oficio, deciden optar por comprar titulo universitario que les permita dar validez académica al arte que ya desarrollan con suficiencia.

Conocer las bases de la mejor manera posible

Las bases sobre las que se produce la creatividad literaria son la gramática, la ortografía y la sintaxis. Cada uno de esos tres elementos permiten a todo escritor desarrollar su actividad, mediante la creación correcta de frases, la construcción idónea de los capítulos y la utilización perfecta de cada palabra, dando a entender el mensaje que realmente quieren transmitir.

Dominar esos tres aspectos no requiere, desde luego, de estudios universitarios, pero sí de mucha disciplina y práctica, por lo que puede ser mucho más favorable utilizar la formación tradicional y con asistencia de profesionales del sector, que intentar dominar esas bases en solitario, a sabiendas de que no es una tarea fácil y que puede llegar a ser muy difícil en algunos pasajes.

Si bien es cierto que su importancia es innegable para lograr un texto de calidad, las bases son sólo eso, bases, y sobre ellas se pueden construir todos los proyectos literarios que se quiera. Pero no precisamente por su dominio, lo que puedas crear después estará condenado al éxito, de modo que tendrás que trabajar y formarte aún más, antes de dar el gran salto al éxito o pretender vivir de ello.

Tomar nota de las influencias

Todo escritor, de la época y trayectoria que sea, ha tenido escritores que le han servido de influencia. Esos escritores que muestran el camino sobre cómo contar las historias, cómo elegir los temas y los personajes, serán tus influencias y no sólo deberás elegirlas bien, sino que también deberás conocerlas en profundidad.

Por eso, la mejor forma de convertirse en un buen escritor, más allá de la formación y el correcto dominio de las bases del idioma y de la escritura, es leyendo a los escritores que pretendas que sean tus influencias.

Pero no leer como divertimento o como rato de ocio, sino leer de forma crítica, lenta y concienzuda, teniendo en cuenta cada uno de los detalles que utiliza el escritor, desde la estructura de sus párrafos hasta la forma en que transcurren sus historias, pasando también por la manera en que utiliza las frases, las palabras, los signos de puntuación y las emociones.

Leer de esa manera tomará mucho tiempo, pero tras realizarlo, tendrás suficientes fuentes e ideas como para crear tus proyectos, utilizando lo que te sirva de cada uno de los libros o autores que hayas leído, modificando y mejorando aquello que pueda ser de mayor utilidad para tu trabajo, pero con las garantías de que estarás respetando las influencias, los estilos y la estructura que hayan podido seguir escritores profesionales a lo largo de la historia, lo que te brindará la seguridad de que los resultados podrán ser más fáciles de conseguir.

¿Es necesaria la formación universitaria?

Volviendo a la pregunta que da origen a todo, ¿hace falta realmente tener una titulación? Realmente, no. Hay muchos escritores que con disciplina y dedicación se han forjado a sí mismos, así como también sucede en otros campos de la vida, donde personas sin estudios han logrado un éxito considerable.

Entre tanto, ¿es recomendable tener una titulación para ser escritor? Rotundamente, sí. La formación acorta el camino del aprendizaje y el dominio de aspectos técnicos y de recursos que luego serán útiles para la creación de proyectos literarios, como el ya citado ejemplo de los escritores, que antes o durante, fueron también periodistas.

Finalmente, no debes dejar de lado que la mayor parte del trabajo de un escritor, además de escribir y practicar, se basa en la lectura y en la investigación, encontrando siempre mejores recursos y técnicas para el desarrollo de su trabajo. Un trabajo arduo, solitario y apasionante, que muchos esperan que se convierta en su pasión y en su vida laboral a tiempo completo.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios