No contaban con mi astucia era el grito de guerra del más famoso héroe latinoamericano de la televisión de los setenta, que se enfrentaba a sus enemigos con armas tan exóticas como el Chipote Chillón o las Pastillas de Chiquitolina. También es el grito de su principal discípulo, Mo Pardo, otro tipo de héroe, que vive en uno de los barrios menos recomendables de Sevilla, perdido en un mundo poblado de mensajes en clave, tesoros escondidos, malhechores tremebundos y mendigos que, dicen, pertenecen a la corte del rey Arturo.
A este héroe tendrá que recurrir de nuevo la inspectora Esther Béjar cuando se tope con uno de los casos más sorprendentes de su carrera, durante un congreso que reúne en Sevilla a coleccionistas y obsesos del mudo del juguete. Quizá sólo él sepa orientarla entre esta charada de cadáveres con ojos vacíos, piezas legendarias y sectas enfrentadas entre sí, que buscan a la vez la reliquia más codiciada.
Luis Manuel Ruiz (Sevilla, 1973) obtuvo el Premio Málaga de Novela en 2014 por Temblad villanos. Ese mismo año, publicó el primer título de la serie del profesor Fo, El hombre sin rostro, al que seguiría El ejército de piedra (2015). Asimismo, es autor de las novelas Tormenta sobre Alejandría (2008), El ojo del halcón (2007), La habitación de cristal (2004) y Obertura francesa (2002), entre otras, y del volumen de cuentos Sesión continua (Premio Cortes de Cádiz 2010). Ha participado en diversas antologías de relatos y colabora regularmente en prensa. Sus obras han sido traducidas a varios idiomas.
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