Al cumplirse el pasado 17 de enero dos años del fallecimiento del escritor Carlos Pujol (1936-2012), Cálamo conmemora este aniversario con la publicación del segundo poemario póstumo de este gran hombre de las letras españolas de las últimas décadas. Se trata de Magníficat, una breve colección de piezas poéticas en torno a la Virgen María. Es el número catorce de la colección Cálamo Poesía y llegará a las librerías y puntos de venta la primera semana de febrero.
El libro (dedicado a su esposa, la pintora Marta Lagarriga) se cierra con un emotivo autorretrato, no exento de ironía, que Pujol pone en boca de la Virgen María, como la mayoría de los poemas: «Érase un niño muy zarandeado/ en un tiempo de guerras y más guerras./ Es posible que guarde en la memoria/ demasiado estropicio y fantasía,/ muchas contradicciones y la música/ que parece imposible del ayer./ Ahora ha escrito para mí estos versos.»
Magníficat aparece estrechamente vinculado con los otros dos libros de Carlos Pujol que ya aparecieron en la colección Cálamo Poesía: El corazón de Dios, un acercamiento sincero y humilde, también irónico, a su relación con Dios; y Bestiario, libro que se editó pocos meses después de fallecer el escritor, donde también exhibe una sabia sencillez para hablar en clave lírica y humorística, a través de los animales, de las eternas preocupaciones de la existencia.
Autor de novelas, cuentos, ensayos, aforismos, biografías y vidas de santos, publicó también catorce libros de poesía, reunidos en su mayoría en el volumen Poemas (Comares, 2007). Con posterioridad han aparecido en Cálamo Poesía El corazón de Dios (2011) y Bestiario (2012), su primer libro póstumo, al que se une este Magníficat (2013). También tradujo en verso a Ronsard, Shakespeare, John Donne, Racine, los románticos franceses, Robert Browning, Elizabeth Barrett, Emily Dickinson, Baudelaire, Verlaine, Hopkins, Samain, Stevenson, Jammes y Guido Gozzano, versiones que él siempre consideró como poesía propia.