EVENTOS

Luis Mateo Díez presenta "La cabeza en llamas"

Luis Mateo Díez (Foto: Javier Velasco Oliaga).

"La cabeza en llamas" contiene cuatro novelas cortas sutilmente entrelazadas

Javier Velasco Oliaga | Jueves 23 de octubre de 2014
El escritor leonés Luis Mateo Díez ha presentado hoy su nuevo libro publicado por Galaxia Gutenberg/Círculo de Lectores La cabeza en llamas, una obra compuesta por cuatro novelas cortas, género en el que él se encuentra muy a gusto, donde lo escrito trasciende las historias contadas y "las sugerencias llenan mucho más la imaginación del lector que lo propiamente relatado", afirma el escritor.


Para Luis Mateo Díez las historias no tienen que ser cerradas, la imaginación es fundamental para la creación

Para Luis Mateo Díez, las historias no tienen que ser cerradas, han de dejar muchas puertas abiertas al lector. La imaginación, esa facultad que cada día se echa más de menos, tiene una importancia capitalen su obra. Todo escritor va buscando su espacio; Díez lo ha encontrado en la novela corta, distancia en la que se encuentra a gusto y en la que cuenta lo que quiere y como le gusta. Sin embargo el libro tiene trampa: las cuatro historias tienen una ligazón invisible y ésta es la característica de sus personajes. "Éstos, son muy míos", especifica el autor.

La presentación del libro se circunscribe dentro de los actos del cincuentenario del Círculo de Lectores, que ayer, 18 de septiembre, celebró la editorial de la mano de sus majestades los Príncipes de Asturias y del premio Nóbel Mario Vargas Llosa. Y a la misma se presentó Luis Mateo Díez,acompañado de sus amigos inseparables Manuel Longares, novelista excesivo y extremadamente original, y Juan Eduardo Zúñiga, el mayor especialista de novela eslava de España.

Este trío inseparable, después de editar sus obras en numerosas editoriales, se han reunido bajo el paraguas de Galaxia Gutenberg para seguir publicando obras con un denominador común que es la calidad, la buena literatura y el reto de la perfección. Puede parecer fuerte, pero lean cualquiera de las obras que en los enlaces les proponemos y me darán la razón. Lo primero que espeta Luis Mateo Díez en la presentación es que su obra favorita y la que considera vital para entender el siglo XX es Vida y Destino de Vasili Grossman. Sólo le podemos decir que tiene toda la razón del mundo.

Para el novelista y escritor de Villablino, "escribir novela corta es un reto a la perfección. Me siento muy a gusto en la novela corta y podía decir que he abandonado prácticamente el cuento", señala. En la novela corta, las características principales de su escritura se dan cita: la metáfora y las partes simbólicas. Su mundo, las historias que construye y sus personajes tienen un parecido sentido de la vida. "Tengo la sensación de que ya escribo desde una partida y de una llegada muy al límite. El que me da mis setenta años de edad", dice el escritor maduro, pero juvenil de aspecto y que mantiene el pulso narrativo que le caracteriza, pero ahora con un estilo que, sin dejar de ser complejo como siempre ha sido, es mucho más sencillo.

En la primera historia, La cabeza en llamas, el protagonista es un personaje de existencia atrabiliaria y desnortada, "un personaje muy mío, alguien que parece que nace para el desorden, que no se aguanta a sí mismo", que suscita continuamente la atracción de la sorpresa y el peligro. Se trata de una vida incendiaria, en la que el descaro y el humor pueden, si nos descuidamos, hacernos arder las pestañas. El contraste es enorme con la segunda historia, Luz del Amberes, en la que un tío invita a comer a dos sobrinos en un lujoso restaurante, y allí los muchachos descubrirán la existencia misteriosa de un hombre que confunde las ensoñaciones con los recuerdos. "El Amberes es un restaurante de mis ciudades de sombra. La novela tiene un contenido fabulístico, con el desasosiego que puede acarrear el dejar su legado a dos sobrinos que no le conocen como deberían", apunta. En la tercera historia, Contemplación de la desgracia, conocemos a dos seres que de contraponen entre sí, con la tensión de un debate de ideas y sensaciones, algo tan secreto y sutil como puede ser el gusto de la infelicidad. "Dos personajes solitarios con extrañas conductas en que los protagonistas conducen la desdicha para producir felicidad. La pena de sentir las cosas, algo que está muy presente en la obra de Turguénev", explica Luis Mateo Díez en la presentación.

Finalmente, la cuarta historia Vidas de insecto, en la misma línea de contraste, que contribuye a que el volumen tenga la variedad con que el autor lo ideó: son unas peculiares, estrambóticas y casi surrealistas memorias de colegio, en las que los escolares protagonistas, alumnos de un colegio de curas tolentinos, realizan un arduo aprendizaje, menos educativo de lo que debieran, pero acaso no del todo inocuo para su destino personal, entre la subversión y la indefensión. "Esta novela es la única que posee unos tintes autobiográficos. Son unas pequeñas memorias escolares escritas en un tono disparatado y excesivo que, sin embargo, no se acercan a la realidad, aún más disparatada. Me he reído mucho escribiéndolas. He disfrutado como un enano y no entiendo cómo puede haber escritores que sufran haciéndolo", concluye el autor.

Luis Mateo Díez
nació en Villablino, León, en 1942. La publicación en 1973 deMemorial de hierbas marca el inicio de una fecunda producción narrativa de la que cabe citar novelas como La fuente de la edad (1986), premio de la Crítica y Nacional de Narrativa, El expediente del náufrago (1992), Camino de perdición (1995), Fantasmas del invierno (2004), La piedra en el corazón (2006) o La gloria de los niños (2008). Con La ruina del cielo fue distinguido de nuevo en el año 2000 con el premio de la crítica y el Nacional de Narrativa. En el libro El reino de Celama (2003) reúne sus tres novelas ambientadas en ese territorio imaginario, y en El árbol de los cuentos (2006) recoge todos los textos publicados hasta el momento de un género que ha cultivado con asiduidad. En 2008 publicó Los frutos de la niebla, el volumen que culminaba la serie Las fábulas del sentimiento, una peculiar comedia humana compuesta por doce novelas cortas que habían ido apareciendo a lo largo de los últimos diez años en los volúmenes El diablo meridiano, El eco de las bodas y El fulgor de la pobreza. En 2000 fue elegido miembro de la Real Academia Española y le fue concedido el premio Castilla y León de las Letras. Su obra está traducida al francés, inglés, italiano, alemán, griego, polaco, neerlandés y húngaro, entre otros idiomas.

Puede comprar el libro en:

TEMAS RELACIONADOS:


Noticias relacionadas