Al respecto, la Editorial Catarata ha editado la obra
José Fernández-Albertos "
Los votantes de Podemos", en la que el investigador del CSIC nos acerca el perfil de quienes hasta la fecha, han depositado su confianza en el partido liderado por Pablo Iglesias. Sin duda alguna, este libro se convertirá en un referente de la politología, afirmación que pudo comprobarse durante su presentación el pasado lunes 22 de junio en el Centro Cultural Blanquerna (Madrid).
En efecto, en un acto moderado por
Belén Barreiro (Fundación Alternativas),
Ignacio Escolar (periodista y director eldiario.es),
Pablo Simón (Profesor Visitante en la Universidad Carlos III de Madrid),
Íñigo Errejón (Secretario de Organización de PODEMOS) y el autor, a partir de la disección de la obra, hicieron una radiografía del actual panorama político español.
En sentido, Fernández-Albertos se detuvo inicialmente en el análisis del votante de PODEMOS, resaltando su evolución. Así, si en un principio eran los activistas los que se decantaban por la formación de Pablo Iglesias (elecciones europeas de mayo de 2014), ahora son los excluidos, entendiendo por tales los más desfavorecidos y más vulnerables del sistema, quienes la eligen.
Además, el autor enfatizó que PODEMOS no es ninguna anomalía ya que resulta costoso crear una brecha en el sistema de partidos. Sin embargo, al contrario que otras formaciones emergentes, es menos transversal y quizás la recuperación económica pueda frenar su crecimiento. Sobre este punto, Errejón se mostró en desacuerdo, afirmando que “la crisis de España no es tanto económica, como de horizontes”.
Por su parte, Pablo Simón expuso que PP y PSOE se han mostrado poco flexibles a la hora de incorporar las nuevas demandas ciudadanas a sus programas, déficit que ha sido aprovechado por PODEMOS. Ignacio Escolar, sobre esta cuestión, añadió que el éxito de Pablo Iglesias se debió a que en los debates televisados en los que se dio a conocer, efectuó un diagnóstico de lo que sucedía España, entrando en debates en los que, partidos y medios de comunicación tradicionales, rechazaban hacerlo.
Siguiendo este hilo argumental, Fernández-Albertos reiteró que PODEMOS “no es ni una anomalía rara, ni un huracán, ni la creación artificial de un medio de comunicación. Su presencia refleja el transcurso natural de las cosas, esto es, una crisis brutal que deja en la estacada a mucha gente, unido a que un sector de la ciudadanía percibe que sus demandas no son canalizadas en el sistema político. Lo que hay que explicar son las razones por las que tardó tanto en aparecer PODEMOS”.
En cuanto a la relación con los medios de comunicación, el autor e Ignacio Escolar objetaron que PODEMOS fuera un producto de La Sexta, aunque como advirtió el periodista, “sin las redes sociales no habría sido posible. La brecha entre lo digital y analógico explica mucho mejor su éxito que la fractura entre medio urbano y medio rural”.
Finalmente, Belén Barreiro abrió dos nuevas vías para próximas investigaciones y debates. Por un lado, un cierto euroescepticismo que caracteriza a PODEMOS y por otro lado, la escasa presencia de la mujer entre sus votantes y representantes. Sobre el primer asunto, Pablo Simón recalcó que la UE, en muchas ocasiones, se ha convertido en chivo expiatorio para medidas que no se toman a nivel supranacional, sino nacional. Con respecto al segundo, la ex directora del CIS sostuvo que quizás pueda deberse a que la mujer es más conservadora y prefiere “lo que hay frente a lo que habrá”.
En definitiva,
Los votantes de PODEMOS ofrece una respuesta avalada por los datos, capaz de desentrañar un fenómeno de magna trascendencia, sin caer en ni en el proselitismo ni en la demagogia.
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