www.todoliteratura.es
Miguel Ángel Delgado
Miguel Ángel Delgado

Se presenta la autobiografía de Tesla "Yo y la energía"

Por Javier Velasco Oliaga
jueves 23 de octubre de 2014, 13:23h

La editorial Turner presentó hoy la autobiografía de Nikola Tesla Yo y la energía, un libro que cuenta con un estudio biográfico del periodista Miguel A. Delgado y dos estudios inéditos en español del inventor croata. El primero, Mis inventos, fechado en 1919 y El problema de aumentar la energía humana de 1900. Un libro fundamental para conocer la vida de este gran inventor, ahora un poco olvidado.

Nikola Tesla ha pasado a la historia como el padre de la corriente alterna, es el paradigma del inventor genial, con una mente creativa sin perspicacia para los negocios y reconocido como el padre de la tecnología moderno y del motor eléctrico. Sin embargo, "su carácter personal fue difícil, tendente a la megalomanía y con poca relación con sus contemporáneos, pero lo más grave es que no dejó discípulos", señala el autor de la introducción del libro Miguel A. Delgado.

Delgado ha escrito una introducción extensa, documentada, que le da al libro Yo y la energía un valor añadido especial, ya que son prácticamente "dos libros en uno", como señaló el presentador José Manuel Sánchez Ron, físico y miembro de la Real Academia Española. La introducción es una semblanza fiel de un científico del que hasta la actualidad sólo se han publicado tres biografías. Pilar Álvarez, editora del libro, introdujo al físico y al autor del prólogo.

Para Miguel A. Delgado, Tesla "parece un personaje surgido de la mente de un guionista o de un escritor, además hay pocos textos sobre él". Esta nube de desconocimiento le hace ser más enigmático y cuando se empieza a escarbar en su vida, nos encontramos con una persona sorprendente que mantuvo una rivalidad constante con Thomas A. Edison, que en su momento era tan conocido como él. Cuentan las crónicas que en 1915 pudo haber ganado el Premio Nóbel de Física, compartido con Edison, pero ambos investigadores se negaron a compartirlo y, por tanto, fueron obviados. Ya en 1912 estuvo nominado al mismo premio.

Su carácter megalómano y reservado le hizo perder oportunidades y no supo defender convenientemente sus descubrimientos. Marconi, conocido como el inventor de la radio, por lo que consiguió el Premio Nóbel en 1909, terminaría perdiendo los juicios planteados por Tesla sobre la paternidad de la radio pero ya una vez fallecido el inventor italiano.

Tesla había nacido en 1856 en Smiljan, actual Croacia, y pertenecía a la minoría serbia. Su padre, un pastor ortodoxo, le dio una educación rigurosa y él fue célibe durante toda su vida. En 1891 adquirió la nacionalidad estadounidense. Fue amigo de Mark Twain, y de otros escritores y artistas que pasaban por su laboratorio, pero vivió en cierta forma retirado en su laboratorio y en su mundo. Atractivo, alto como un jugador de baloncesto, ya que medía más de dos metros, maniático, tenía una tipología del síndrome de Asperger, algo parecido al doctor Mateo de la serie de televisión.


Nikola Tesla es, para Delgado, "un desconocido, pero que está más vivo que nunca", y va a ir a más, ya que él fue un gran defensor de la energía eléctrica, de la energía solar, de la energía eólica y contrario furibundo de la energía atómica. Nunca aceptó la Teoría de la Relatividad de Einstein. Y ahora, poco a poco, se le va dando la razón, cuando se vuelve a diseños que él ya expuso a comienzos del siglo pasado, como el motor eléctrico o la forma de transmisión de energía eléctrica a distancia. Algunos visionarios le han achacado la explosión de Tunguska de 1908, pero para el autor de la introducción del libro, "solo son teorías de conspiranoicos y frikis de foros".

Todas esos desarrollos de sus inventos le llevan a decir a Delgado que "si el mundo que tenemos es tal como es, gracias a Nikola Tesla" y se pregunta "¿cómo es que un hombre tan original haya prácticamente desaparecido?". Ahora hay varias campañas para que se le reconozcan sus méritos y patentes, algunas robadas y otras que achacan a Edison lo que él inventó, como ocurre con 17 patentes en el museo Smithsonian.

Sin embargo, escritores como Paul Auster o Thomas Pynchon, le hacen protagonista de algunas de sus novelas y Christopher Nolan en su película El truco finalle retrata, interpretado por David Bowie, como un científico genial con algo de mago en una de las escenas más impactantes de la cinta, iluminando un campo a distancia. Por eso, como han señalado diversos artistas, "tiene un algo que inspira" y ha sido uno de los mayores científicos del mundo.

Sánchez Ron señala la importancia del libro con las siguientes palabras: "interactúa entre la ciencia y la tecnología" y su pensamiento, ya que el segundo texto de Tesla es para el físico "fascinante, porque cuenta cómo es su mundo", un mundo que no ha tenido la difusión necesaria debido a su carácter de perdedor, de mal empresario, pero de genio recluido que tenía su mundo en la cabeza, que diseñaba, veía su inventos en la cabeza, que los reparaba y probaba en su cabeza y una vez hecho esto, los construía, como sólo un genio visionario podía hacerlo.

Por eso, Tesla ha pasado a la historia como algo más que la unidad de medida del campo magnético. Este hijo de su tiempo tenía tanto de científico e inventor como de artista. Pensaba globalmente y quedan aquí sus palabras más significativas: "no voy a inventar la bombilla, voy a cambiar el mundo". 

Puede comprar el libro en:

             Logo FNAC <br />120x60                       IberLibro.com - 110 millones de libros nuevos, antiguos, agotados y de ocasión

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (3)    No(1)

+
0 comentarios