www.todoliteratura.es

Sergio Vila-Sanjuán publica el 12 de febrero "Estaba en el aire", novela con la que ganó Premio Nadal de Novela 2013

La novela de un país que despierta
Por Evaristo Aguado
jueves 23 de octubre de 2014, 13:23h
Sergio Vila-Sanjuán publica el 12 de febrero 'Estaba en el aire', novela con la que ganó Premio Nadal de Novela 2013

Sergio Vila-Sanjuán, Premio Nadal de Novela 2013 por Estaba en el aire, rubrica una atrayente novela sobre un país que despertaba al mundo en la década de lo sesenta. Una ciudad que abría sus calles y avenidas a los 600 y sus hogares a los tocadiscos Königer, a las neveras Kelvinator y a los aspiradores Ruton. Una urbe en plena transformación, como sus habitantes, vibrantes y exaltados, que avanzaban hacia la libertad.

Sin embargo, el crecimiento y el progreso siempre tienen un reverso tenebroso. La Barcelona de los años sesenta contaba con más de millón y medio de habitantes. Entre los años 1963 y 1964 llegaron a la ciudad casi 300.000 inmigrantes. Muchos de ellos, antes de lograr prosperar y asentarse en una ciudad en expansión, vivieron en medio de grandes bolsas de pobreza.

Un ejemplo de ello es el barraquismo del Somorrostro, un poblado alzado de la noche a la mañana en la playa de la Barceloneta. Este barrio desapareció en 1966, aunque durante mucho tiempo dio cobijo a muchos gitanos y a muchas familias desheredadas. Y también a uno de los protagonistas de Estaba en el aire: Antonio Luna, un joven cántabro recién llegado a la ciudad en busca de fortuna y de un todavía más noble propósito, recuperar a su familia perdida durante la Guerra Civil Española.

Antonio Luna fue evacuado a Suiza durante la contienda. Escapando junto a su familia durante un bombardeo, su madre logró resguardarlo en un camión, pero ni ella ni su otro hijo consiguieron subir al transporte. Esa fue la última vez que se vieron. Tras la guerra, Antonio pasó gran parte de su infancia en un hospicio de Santander. Mayor de edad, decidió probar suerte en la efervescente Ciudad Condal. Su llegada en tren, traumática -le robaron todo lo que tenía después de engañarlo vilmente- terminó con una extraña acogida en el poblado del Somorrostro, dónde recibió el cariño de los gitanos.

Mientras guardaba la esperanza de volver a encontrarse con los suyos -apenas unos vagos recuerdos de su infancia en la ciudad le otorgaban seguridad de sus orígenes y de su destino-, empezó a trabajar en Los Encantes, pero rápidamente encontró un próspero trabajo en la SEAT, uno de los principales símbolos del "desarrollismo" español. ¡Había llegado el 600! Antonio Luna se estrenó en la cadena de montaje, donde -aunque él jamás participó- empezaron a gestarse los gérmenes del sindicalismo más combativo de oposición al régimen, que seguía implacable, a pesar de la cierta apertura económica y social, en sus atributos políticos.

El destino de Antonio Luna iba a cambiar por completo, gracias al paso por ese gran entramado industrial capaz de fabricar 300 coches al día para dar salida a la gran demanda, la gran explosión de consumo de nuestro país; y también gracias a un programa de radio: Rinomicina le busca. España le llama.

Una mujer de la alta sociedad, muy bella y muy desgraciada. Un publicitario embarcado en un programa radiofónico que busca a personas desaparecidas. Un magnate con buenos contactos políticos dispuesto a consolidar su imperio. Un joven del Norte que rastrea sus orígenes. En la Barcelona de 1960, las trayectorias de todos ellos se cruzan iluminando ambientes contrapuestos.

Estaba en el aire es una historia de sentimientos y búsqueda personal, de periodismo e intrigas empresariales, que transcurre en un momento histórico poco abordado por la narrativa actual. Un momento en el que España empezaba a salir de la negrura de postguerra para convertirse en una sociedad de consumo, animada por promociones televisivas y elegantes fiestas veraniegas a la luz de la luna, como las que frecuentan los protagonistas de esta novela.

Sergio Vila-Sanjuán (Barcelona, 1957) estudió Historia en la Universidad Autónoma de Barcelona (1974-1979) y participó en el Taller Literario que dirigía en Sitges José Donoso. Posteriormente fue becario Fulbright en la Universidad de Boston, donde estudió con el sociólogo Peter L. Berger.

Desde 1977 se dedica al periodismo cultural. Fue jefe de cultura de El Correo Catalán, redactor-jefe de El Noticiero Universal y desde 1987 trabaja en La Vanguardia, donde actualmente es coordinador del suplemento Cultura/s. Especialista en temas literarios y en el mundo del libro, ha estudiado la historia de la edición española en Pasando página. Autores y editores en la España democrática (Destino, 2003) y distintos aspectos del mundo del libro internacional en El síndrome de Frankfurt (RBA, 2007) y Código best seller (Temas de Hoy, 2011).

Reunió el grueso de sus trabajos publicados en prensa en Crónicas Culturales (DeBolsillo, 2004). Y dirigió junto a Sergi Doria Paseos por la Barcelona literaria (Grup62/Fundación Germán Sánchez Ruipérez, 2005).

Fue comisario del Año del Libro y la Lectura de Barcelona 2005, supervisando un programa de más de mil actividades desde el que creó la Semana de Novela Negra de la ciudad y el festival literario infantil Món Llibre. En el 2012 ha dirigido el ciclo de conferencias del Tricentenario de la Biblioteca Nacional de España, El libro como universo.

También ha trabajado de forma regular sobre pintura figurativa contemporánea. Autor de la primera monografía dedicada a Miquel Barceló (Barceló, Àmbit, 1984), fue comisario de las exposiciones Realismo de vanguardia (1997) y Realismo en Cataluña (1999).

En el año 2010 publicó su primera novela, Una heredera de Barcelona (Editorial Destino), en la que recrea las vivencias de su abuelo, periodista y abogado, en los conflictivos años 20. Traducida al catalán, al inglés y al polaco, sus derechos han sido adquiridos para una miniserie televisiva. En enero de 2013 gana el Premio Nadal con su segunda novela, Estaba en el aire.

Puede comprar el libro en:

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios