En la segunda mitad del siglo veintiuno, la Ciudad es una frívola espiral de consumo y endeudamiento. Una telaraña de burócratas y macro estructuras económicas vigila hasta los actos más íntimos por medio de la gran red Totalnet. Ni los sueños escapan a su control.
Fernando ve cómo su vida se diluye entre su trabajo de vendedor de sueños a la carta y un ocio vertiginoso y absurdo, en el que las relaciones son tan fugaces como los juegos de luces e imágenes que empequeñecen las calles. Laura le cautiva con su calma y sencillez. Con ella conoce el amor, recupera los sueños y se prepara para luchar. Pero para rescatar su propio yo habrá de afrontar las consecuencias de la decisión más difícil: convertirse en el único dueño de su destino.
A lo largo de estas páginas se revela el poder redentor de los sueños como bálsamo para recobrar la identidad y los sentimientos de quienes abdican de su propia vida. En el túnel de los sueños se abrazan recuerdos, sensaciones, inquietudes y esperanzas. Y al final del viaje está la conciencia, la historia personal de cada uno.
El manipulador de sueños es la crónica de esa lucha y de esa redención.
Este libro habla de asumir riesgos. De no quedarse en la solución más cómoda. De ser protagonista de la propia vida. De asumir la propia identidad y no la de otros. No la que otros nos dan. Esta es una novela distópica que se adentra en la utopía cotidiana que implica la necesidad de llegar a ser uno mismo. No el reflejo de lo que la sociedad pide que seamos, sino lo que en verdad somos. Para ello hay que intentar saber, querer saber: la distancia entre el ser y el querer ser traza el camino. La necesidad de la lucha.
Para vivir hay que salir a luchar, salir a la carga. Llegar a la tierra de los sueños: esa parte de nosotros que aún está por conquistar.
Porque, como descubre el protagonista: “…la verdadera locura, la conducta que llevaba a la demencia en nuestro mundo virtual era no conducir, no asumir los riesgos, no guiar con tu mano tu propio destino.”
Los sueños llaman a la carga.
Abrid los ojos.
Eduardo Sánchez Aznar (Madrid, 1970). Jurista de formación, ha cursado también estudios de Criminología, Historia y Escritura Creativa. Varios de sus relatos se publican en las antologías de la «Generación Subway» (volúmenes II al VI), y en otras de la editorial Playa de Ákaba (Cuentos de Navidad, Madrid en Feria, Carta a la madre, Crímenes callejeros, Personajes de novela, El oasis de los miedos, Semillas de bosque…), que también ha publicado su novela El manipulador de sueños.
Puedes comprar el libro en: