En efecto, cuatro leyendas vivas del periodismo español de las últimas décadas (José Vicente de Juan, Miguel Ángel Aguilar, José Eulogio López y José Oneto) reflejaron que Luis Valls-Taberner trascendió el mundo de los negocios y fue un auténtico humanista, sobresaliendo su defensa de la democracia y su europeísmo.
José Vicente de Juan (Vicepresidente de la Fundación Diario Madrid) fue el primero en tomar la palabra. Hizo una interesante definición del libro (“hecho desde el afecto, el conocimiento y el rigor emocional”) y recordó la implicación de Valls-Taberner en el Diario Madrid, apostando por la libertad de prensa frente a la censura. En palabras de De Juan “se atrevió a plantar cara y defender una democracia europea, mostrándose como un valiente y un visionario”. Asimismo, anticipó algunos aspectos de la estructura y contenido de la obra, como la adecuada selección de las citas por parte del autor, lo que refleja su formación y también la cultura del protagonista del libro.
Posteriormente intervino Luis Valls-Taberner Muls, quien señaló diferentes aspectos de la personalidad de su tío al que “no le hubiera gustado que se hiciera un libro sobre él ya que era muy discreto y partidario de los hechos, no de las palabras”. Igualmente, el autor tuvo palabras de agradecimiento para la Fundación Diario Madrid, concluyendo que la democracia no sería posible hoy en día en España sin la labor desarrollada por los periodistas en y durante la Transición y la pre-Transición.
Miguel Ángel Aguilar contó numerosas anécdotas de su relación con Luis Valls-Taberner ya que mantuvo una intensa amistad con él. Recordó que fue una figura clave en la creación de la Asociación de Periodistas Europeos, producto “de tener una idea de la responsabilidad social muy anticipada”. En cuanto a la obra, la definió como “un trabajo valioso, impregnado de cariño y de buen sentido intelectual”, sobresaliendo el adecuado título de cada uno de los capítulos.
Por su parte, el periodista especializado en asuntos de economía José Eulogio López, resaltó también la importancia que a la obra social concedió Luis Valls-Taberner, cambiando para ello determinadas conductas que se hallaban plenamente arraigadas en el mundo de la banca, como la participación en los beneficios. Finalmente, José Oneto cerró el acto, subrayando que Luis Valls-Taberner siempre prestó auxilio y patrocinio a los medios de comunicación.
En definitiva, Luis Valls-Taberner Muls con la realización de esta obra homenajea a su tío y lo acerca al gran público, reflejando su carácter de actor protagonista de una época fundamental en la historia de España.
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