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Javier Velasco Oliaga, Fernando Martínez Laínez y José Luis Hernández Garbi
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Javier Velasco Oliaga, Fernando Martínez Laínez y José Luis Hernández Garbi (Foto: Azucena del Valle)

Fernando Martínez Laínez presenta su libro de relatos "Luna de cuervos"

Por Azucena del Valle
jueves 22 de diciembre de 2022, 11:58h

"LUNA DE CUERVOS es una trayectoria sentimental; recopilé relatos y cuentos que se publicaron en una revista… y al final de la carrera, lo presento como un recuerdo personal…", dixit Fernando Martínez Laínez durante la presentación de su nuevo libro.

  • Brindando por el éxito de "Luna de Cuervos"

    Brindando por el éxito de "Luna de Cuervos"

Fernando Martínez Laínez
Fernando Martínez Laínez (Foto: Azucena del Valle)

- Jo Vani, ¡mira que pedir morcilla! Seguro que se le ocurrió al zampón del Oliaga que le gusta la matanza. Criatura irredenta, con lo buena que está la lechuguita…

- Veo que empiezas por el final, con el buen rato que pasamos con esos contertulios tan enrollados; gente chula y de nivel con la que te diviertes y aprendes… y es que nos metemos en cada sitio… Esto del no parar cada día me mola más.

- Nos ha dado por la culturización y ya vamos teniendo jeta, porque eso de tomar un vinito durante la presentación tiene su cosa, que cada día tengo más cara, un suponer. Me estoy echando al monte a pesar de las buenas compañías, que esta vez eran, mayormente, excelentes. El prota era Fernando Martínez Laínez, ensayista, periodista y escritor, que presentaba un libro delicioso, LUNA DE CUERVOS, que cada vez me gustan más las historias cortas y oscuras, léase negras, no los mamotretos de ochocientas páginas que ni miro desde hace tiempo. Le acompañaban José Luis Hernández Garbi, otro escritor con más de treinta galardones nacionales y Javier Velasco Oliaga, periodista, escritor y director de Todoliteratura que solo tiene las copas del Real Madrid y las etiquetas de Anís del Mono. Éste se esforzó regular porque se pasó la tarde riendo y presentó más bien poco, porque el público entregado era mayormente conocido.

- Lo que más me pone es que todos sabían mucho de espías, y como nos ha dado por el mundo de la ocultación, ya me he comprado la gabardina sin esperar a las rebajas. ¿Sabías tía que Fernando, hombre culto y viajado es el presidente del Club Letras y Espías? ¡Eso sí que tiene futuro en este mundo imperfecto que cada vez tiembla más, y no por frío!

- ¿Y quién no, Vani, si es público y notorio? Vaya tío majo y cercano a pesar de la erudición, que cada vez me gustan más las personas que saben y no se las dan de nada; y su mujer, Carmina, un encanto de criatura siempre pendiente…

- Sí Puri, tía, pero desarrolla, que últimamente te vas mucho por las ramas desde que andas por el monte. Luna de Cuervos, ya solo por el título, es atractivo y he comprado varios ejemplares para regalar en estas fechas, que una no es tonta y sabe cómo acertar en las fiestas de amor y paz…

- Comencé a leerlo esa misma noche después de la morcilla. Treinta y un relatos de distinta extensión; algunos casi novelas cortas, que debieran aprender muchos autores este género literario que dice mucho en pocas páginas, en los que recopila historias y cuentos de manera personal -ayudado siempre por su señora en el compendio y en la sombra- de momentos que le han ido marcando a través de su vida viajera. Se trata de un itinerario sentimental al hilo de los sitios que he ido recorriendo… dice el autor, y no le falta razón, porque habla de Moscú, ciudad fría en la que habitó, y de otros muchos lugares y momentos. Relata el crimen perfecto y yo, pava como siempre, solo pensaba en la lejanía en el vudú o en congelar a las personas que no quiero… Ni te imaginas, ¡es el de Kennedy! ¿Y sabes por qué, criatura? por la multiplicidad de pistas; interviene la mafia, que subvencionó la elección, la política, los negocios, el sexo, Sinatra siempre con su tema, Marilyn que murió de guapa e incauta… un conjunto de cúmulos, que diría Cari de la Mancha, y una familia destruida, alcohólica sin remisión y con muertos a casco porro aún en la actualidad. Una tragedia, criatura, de la que habla Fernando.

- Pues tía, eso me queda a miles de km y me ponen más las historias del tesoro de la Catedral de Toledo, que le contó el deán Herencio, léase el sacerdote de la iglesia católica que preside el cabildo de una catedral después del obispo, que hay uno sustancioso y tremendo, según el; y una tribu de buhoneros que se dedican a recoger objetos que deja el río en una ribera arenosa, según le contaron en una noche de farra toledana…

- Y ¿qué me dices de las historias de la Transición -ese remanso de época de concordia y paz que muchos niegan por gilipollas- o, mayormente, las que tienen que ver con el vino de Rioja que me pone cantidad? Y aún no me has dicho quién era ese que estaba a tu lado dándote conversación y que intervenía en la presentación sin molestar aportando vivencias.

- Ja, ja… chorvo interesante el tal Martínez, Ricardo, ilustrador editorial y humorista gráfico, que escuché off de record que tenía planes de futuro con el autor Fernando que afirmaba al principio de su intervención el final de la carrera… ¡será cara! ¡Con lo que tiene que contar todavía y nosotras que disfrutar! Que me voy corriendo, que estoy enganchada a Luna de cuervos, mañana te cuento.

- Ahí me has dado Vani, que no vas a acabarlo antes que yo y no pienso perderme un evento de la Galería Modus Operando; chula, chula.

- Cien por cien Puri la rápida, cien por cien.

Puedes comprar el libro en:

9788412466485
La gran familia de Fernando y alguno más
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La gran familia de Fernando y alguno más (Foto: Azucena del Valle)
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