“En esta ocasión, he construido un thriller más policial, con menos psicología. Creo que me ha quedado una novela de acción donde no hay mucho tiempo para reflexionar. La muerte está acechando más que en ninguna de mis obras”, cuenta el autor de Portugalete nada más comenzar nuestra charla, y agrega “he querido introducir más diálogos porque son una herramienta súper eficaz para construir personajes. Se van presentando ellos mismos. Por ejemplo, Denis lo vamos conociendo mediante los demás protagonistas”.

En “El hijo olvidado” la acción está en función del personaje principal, nos va mostrando su entorno y su familia, que no la conoce como él se creía. “Hay conflicto desde la primera página por culpa del sobrino del agente de la Ertzaintza Aitor Orizaola, «Ori», un agente en horas bajas que se recupera de la violencia sufrida en su último caso. Me apetecía escribir una novela con mucha acción e interrogantes”, nos adelante el autor.

Hay un caso muy turbio dentro de una trama de investigación. Aitor Orizaola es un policía dispuesto a saltarse los límites con tal de resolver la corrupción policial que hay. “Hay una corrupción derivada de otra. Hay cosas que fallan en la policía. En esta ocasión, el procedimiento está manchado, algo habitual, y eso desvirtúa las pruebas. En la novela, algunos ertzaintza están haciendo mal uso de su placa”, cuenta Mikel. Y no solo algunos, hasta el propio protagonista la utiliza de forma ilegítima.

Cuando es acusado su sobrino Denis de un crimen, Orizaola se moviliza para demostrar que no puede ser él. Se salta algunos reglamentos para intentar demostrarlo enfrentándose a varios compañeros del cuerpo que actúan como una verdadera Mafia. No le importa enfrentarse a un expediente disciplinario para sacar a su sobrino de un proceso por asesinato. Para ello, cuenta con la ayuda del singular abogado Orestes que lo cambia todo. “Aprovecha la picaresca para abrir una brecha entre los policías corruptos. Es una gran ayuda para Aitor”, señala el autor.

“La infalibilidad de la policía no es tal, como organización humana comete muchos errores”

Para Mikel Santiago, “la policía es una organización que suele tener muchos problemas y, también, sus miembros. La infalibilidad de la policía no es tal, como organización humana comete muchos errores. Para documentar el libro, hablé con diferentes policías y me contaban unas cosas que no me las podía creer. La vida de los polis es flipante Eso ha hecho que los valore mucho más.”

El autor se define como “una persona muy creativa y organizada”. “Me gusta contrarrestar los problemas organizativos con la imaginación; para eso, tengo muy esquematizado la forma de trabajo y la trama de las novelas. Ya que es un proceso intelectual muy potente. En ocasiones, estoy afásico, otras huraño, a veces monosilábico, sobre todo cuando estoy escribiendo, pero cuando termino y me dedico a la promoción soy unas castañuelas, el escritor más simpático y dicharachero del mundo. Para mí, todo es un trauma”, confiesa.

La clave de los libros es mezclar sabiamente lo complejo con lo sencillo

“El hijo olvidado lo he planificado como un puzle. No quería dar una explicación final para resolver el caso, que siempre suele ser muy inverosímil. Creo que la clave de los libros es mezclar sabiamente lo complejo con lo sencillo, pero siempre tiene que haber un gran enigma para que el lector se implique emocionalmente. Hay que invitarle a jugar sin que falte ese lado”, explica Mikel Santiago.

Durante nuestra conversación hablamos de cómo es el protagonista. “Tiene mucho del típico perdedor. Es un antihéroe, un personaje abandonado por la sociedad que quiere redimirse. Estamos acostumbrados a encontrarnos que todo es muy bonito, que los protagonistas tienen un físico imponente, que son inteligentísimos y a mí todo eso me toca las narices. Yo quiero personajes humanos con sus luces y sus sombras”, sostiene el autor con determinación.

“Creo que Aitor muestra su nobleza cuando defiende a su sobrino y responde a ese marrón familiar que tiene. No le conocía realmente, lo subestima un poco, pero luego resulta ser más maduro de lo que parece y aguanta la situación jodida que tiene. La novela me parece que ha quedado muy empática”, concluye el escritor que utiliza el paisaje de Vizcaya para casi todas sus obras. Quedamos a la espera de los próximos proyectos que se van a llevar a la televisión, bien como serie o bien como película.

Mikel Santiago nació en Portugalete (Vizcaya) en 1975. Comenzó escribiendo relatos y novelas cortas, y publicando sus propios e-books en internet, con los que consiguió llegar a las listas de best sellers de iTunes, Amazon y Barnes & Noble. Ha vivido en Irlanda y en Ámsterdam. Actualmente reside en Bilbao.

Ediciones B ha publicado sus novelas La última noche en Tremore Beach (2014), El mal camino (2015), El extraño verano de Tom Harvey (2017), La isla de las últimas voces (2018), El mentiroso (2020) y En plena noche (2021). Todas ellas han escalado hasta los primeros puestos en las listas de best sellers en España, han sido editadas en una veintena de países y han conquistado por igual a los lectores y a la crítica literaria. En la actualidad, está considerado como uno de los mejores autores de thriller a nivel internacional.

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