Nuestro poema de cada día
10/10/2025@11:11:00
José Cadalso (1741-1782) -que utilizó el pseudónimo de Dalmiro- se incorpora a nuestra historia literaria con títulos como Los eruditos a la violeta (1772), Noches lúgubres (1793) y Cartas Marruecas (1798). Los eruditos a la violeta se hizo muy popular en la época]; y es una sátira contra un cierto tipo de educación entonces frecuente: la erudición basada en la superficialidad. El contenido y estructura de la obra quedan claramente reflejados en el subtítulo: “Curso completo de todas las ciencias, dividido en siete lecciones, para los siete días de la semana, publicado en obsequio de los que pretenden saber mucho estudiando poco”. El título alude a uno de los perfumes, el de la violeta, que se puso de moda por jóvenes que se las daban de cultos.
Con respecto a las manifestaciones maximalistas del Sr. Benítez, que ahora, como una amplia globalidad hispana se nos ha vuelto mahometano ferviente, deseo indicar sin acrimonia:
La editorial quiere recuperar textos inencontrables que en algún momento conmovieron a sus responsables
“También llamado el País de las Montañas de Dios. Situado al norte de Ardistán, fue gobernado durante miles de años por la familia Durimeh, siempre por una mujer. En el centro de la isla Ikbal, en el río Ed, se halla el palacio de mármol blanco, única residencia real visitada por extranjeros. El velero Wilahde es la única comunicación entre Ikbal y los países vecinos.
Autora de "Todos los hombres tristes llevan abrigos largos"
No me puedo quitar de la cabeza un estribillo de Carmen París: «Anda que no tiene guasa, lo que a mí me pasa». También la tiene lo que le pasa a la protagonista de "Todos los hombres tristes llevan abrigos largos", de Rebeca Argudo, periodista y novelista de firme convicción: el desamor es comiquísimo, y creencia inquebrantable: en la ficción, cabe todo lo que acepte la imaginación; en la realidad, todo lo que permita la conciencia.
|
“Operación filisteos” es el título de la nueva novela que acaba de publicar la editorial Almuzara. Se trata de una obra del capitán de navío, Antonio Ruibérriz de Torres, quien, basándose en hechos reales, narra los entresijos del complot que se urdió para acabar con la vida de Franco durante su visita a la inauguración de la basílica del Valle de los Caídos.
Nuestro poema de cada día
Francisco de la Torre, (¿1534 - 1594?), poeta español de la segunda fase del Renacimiento, perteneciente a la Escuela de Salamanca, que no hay que confundir con el poeta homónimo de la primera mitad del XVI.
Cátedra, Madrid, 2020
Un cierto resabio moralizante parece discurrir más o menos explícito por los versos de este libro cuyo destino poético-didáctico no solo no se oculta sino que, gracias al dominio del lenguaje y a lo que se intuye como formación ética de la autora, se manifiesta creando un corpus original y, diría, necesario, por cuanto no es el tono habitual del contenido poético que se nos suele trasladar al lector.
|
|
|