Azucena del Valle cada día se muestra más descarada, nos lo demuestra en "¿Parejas imposibles?" Sin embargo, no hay tales. Lo que hay son parejas interesadas. Un amigo, ya talludito, me contó un buen día que le gustaba bailar agarrao, con la mano derecha de la dama en su corazón. Lo que no me dijo es que en el bolsillo de la camisa llevaba la cartera bien preñada de chistorras. La joven solía decir a los cuatro vientos que el money facilitaba la felicidad. Lo que no me contó es que la crisis del 2008 le dejó la cartera más seca que una lechuga puesta al sol. Ya no había con que regarla.