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"Apología de Sócrates", de Platón (traducción Julio Calonge)

Ed. Gredos. 2022
martes 14 de noviembre de 2023, 14:56h
Apología de Sócrates
Apología de Sócrates
Platón de Atenas era considerado, en la Antigüedad, como el filósofo o estudioso de la psique-alma por antonomasia. Sus obras siempre han sido valoradas como la esencia a la que se vuelve, de continuo, dentro del pensamiento filosófico universal. En la Antigüedad se le consideraba como al enviado, eximio, del dios Sol o Apolo, cuyo espíritu regresa tras la muerte en forma de águila del Olimpo, y así poder vivir eternamente con los dioses.

En la actualidad de los siglos XIX, XX, XXI se le acepta, inclusive, como el origen, sensu stricto, de la democracia misma; por consiguiente, Platón de Atenas despierta la adhesión incondicional de sus seguidores. No obstante, el filósofo ateniense también tiene sus detractores, inclusive ha habido algún pensador germano que lo ha acusado de ser el primer nacionalsocialista de la Historia. Ya que, es indubitable, que algunos totalitarismos de derechas lo han utilizado para otorgar carta de naturaleza a su reprobable ideología, sin la más mínima base para ello. Sea como sea, Platón de Atenas no deja indiferente a nadie, ya que siempre fue un ser humano muy comprometido con su tiempo, por medio de sus ideas; y asimismo fue una propuesta prístina política y ética para la sociedad y para el propio sujeto, y ello conduce a que su pensamiento tenga una validez universal.

«Dada la posición central que ocupa Platón en la historia del pensamiento, no es extraño que nuestro conocimiento de su vida esté rodeado del enigma y de las incertidumbres que acompañan a la interpretación de su obra. Las versiones que se han transmitido seducen por lo azaroso de las vicisitudes por las que supuestamente pasó el aristócrata ateniense. La fecha de nacimiento de Platón se fija generalmente el 7 del mes de targelión (mayo) de 428/427 a.C. Este dato, que puede encontrarse en prácticamente todas las biografías al uso, para por alto que esa fecha coincide sospechosamente con la del aniversario de Apolo en el calendario religioso de Atenas. Otra tradición fija en ese mismo día la fecha de su muerte, que, generalmente, se data en el año 348/347 a.C. Estas referencias ignoran otras tradiciones que establecen su nacimiento en 429 a.C. y hacen durar su vida no la cifra redonda de ochenta años, sino uno o dos años más. Las fechas de nacimiento y muerte no pueden ser sino aproximadas, ya que desde muy temprano sus biógrafos se dedicaron a retocar los datos de su vida para hacerla coincidir con determinados signos que indicaron el carácter divino del filósofo. A lo sumo puede afirmarse que la vida de Platón transcurrió entre la guerra del Peloponeso y la década anterior a la victoria de Filipo de Macedonia, el padre de Alejandro Magno, en Queronea, victoria que significó el fin de la independencia de las ciudades-Estado griegas».

Su familia pertenecía a la aristocracia ateniense de más rancio abolengo; ya que su padre, llamado Aristón de Atenas, descendía supuestamente del último soberano ateniense, el rey Codro (c. 1089-1068 a.C.). Su familia no tenía el más mínimo empacho en remontarse, en sus orígenes mitológicos, hasta el mismo dios Posidón-Poseidón. Desde el punto de vista tradicional, su madre, que se llamaba Perictione, se estima que estaba emparentada con el sofista Critias (460 a.C.-403 a.C.), quien formó parte del gobierno de los Treinta Tiranos, impuesto por los espartanos tras su victoria sobre Atenas, en la guerra del Peloponeso, durante menos de un año entre 404-403 a.C. No obstante, este gobierno oligárquico breve, produjo la muerte, por represalias, de un 5% de los atenienses, con la confiscación de sus propiedades, y el forzado exilio u ostracismo de los demócratas. Otros estudiosos lo hacen descender, directamente, asimismo del poderoso legislador Solón de Atenas (638 a.C.-558 a. C.). Además del citado filósofo, el matrimonio tuvo otros tres hijos, que se llamaron: Glaucón (c. 445 a.C.-c. 400 a.C.), Adimanto (432 a.C.-382 a.C.), y Potone (427 a.C.-¿?), esta hermana sería la madre del filósofo Espeusipo (408 a.C.-339 a.C.), quien sucedería a su tío, tras su muerte, al frente de la Academia de Atenas. Perictione se casó con Pirilampo, tras enviudar, y tuvo otro hijo llamado Antiphone-Antifonte (423-413 a.C.-¿?), este es el narrador del Parménides. Se colige que este nivel social daría opción a una educación muy esmerada y elitista. Se le enseñó a leer y literatura griega; además de gimnasia, concretamente lucha, por medio del maestro de Argos, Aristón; la tradición indica que este maestro fue el que le motejó de Platón o ‘ancho’ por sus anchas espaldas. La personalidad de Sócrates (470 a.C.-399 a.C.) tuvo una influencia determinante con relación a la amplia formación intelectual del maestro ateniense.

Tras la derrota ateniense en la guerra del Peloponeso en 404 a.C., se instaura en Atenas un régimen oligárquico cuyos principales miembros provenían del círculo socrático. El recelo de la democracia ante el hombre que los inspiraba ideológicamente se puso de manifiesto rápidamente y, tres años después de la restauración, Sócrates es condenado a muerte (399 a.C.). Platón y otros seguidores del maestro deben huir y se refugian en Megara, donde son acogidos por Euclides y Terpsión, antiguos alumnos de Sócrates y fundadores de la escuela megárica”.

La muerte de su maestro conllevó que Platón realizase un importante periplo de viajes, para tratar de escapar de la Atenas oligárquica, a la par, olvidar la muerte de Sócrates e incrementar sus conocimientos culturales y sociológicos; aprovechando sus viajes para representar, comercialmente, a su familia. En primer lugar, llegará a Egipto, donde se encargará de la promoción y venta de su aceite, en el mercado de Náucratis. En Cirene, tuvo contactos con el matemático Teodoro (465 a.C.-398 a.C.), y con los filósofos de esa polis, seguidores de Aristipo (435 a.C.-350 a.C.), este último discípulo, también, de Sócrates. Otros historiadores de la Antigüedad sostienen que se detuvo en Delos, para desde ahí regresar a la capital del Ática, su Atenas natal, antes de viajar hasta la Península italiana, a la región de la Magna Grecia, con su capital en Tarento-Taranto, y llegarse hasta la isla de Sicilia.

Este período fue fundamental para su formación filosófica, ya que se familiariza con las doctrinas de los megáricos, los cirenaicos, los pitagóricos y, si la tradición que lo coloca en Egipto es verdadera, con las doctrinas y la ciencia de ese pueblo. Particularmente fructífero fueron su encuentro en Tarento con la filosofía pitagórica y su amistad con el jefe de la escuela, Arquitas de Tarento. Una tradición pretende que utilizó su estancia en Tarento para adquirir todos los escritos secretos de Pitágoras y Filolao”. La fama de Platón ya desbordaba los límites geográficos de Atenas, y era conocido en todo el orbe de la filosofía de su época. Sus viajes le servían para que fuese notorio entre todos los pensadores del Mundo Antiguo. En suma, nuevo acierto de la conspicua editorial Gredos, esencial para el conocimiento en la Antigüedad. «Donec Bithynio libeat vigilare tyranno».

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