Las palabras también pueden matar, asesinar, conspirar en la sombra para obtener el poder, para que nadie esté por encima del rey, y ese rey quiere ser Ricardo III.
Un enfrentamiento dialéctico del más alto nivel, un choque de gigantes que pelean por un trono, un aguacero de tormentas desatadas, falsedad y buenas maneras, pero besos ensangrentados de odio y fuego.