Entrevista a Diana Paris, autora de ‘Secretos familiares’

P. ¿De dónde surge el libro ‘Secretos familiares’? ¿Cómo se te ocurrió?
R. La idea nace a partir de mis propias búsquedas personales, para comprender dolencias y mandatos familiares debí salir al encuentro de la verdad ocultada por más de 60 años: la muerte de mi abuela materna al momento del parto de mi madre en medio de un crimen. A partir de esa información todo se re-acomodó. Fue doloroso pero muy liberador: ahora cada persona del árbol genealógico ocupaba su lugar y recuperaba su identidad y sus roles. La mentira se anudó por tres generaciones hasta que “esa papa caliente” dejó de pasarse de mano en mano… Como psicoanalista me especialicé en lo transgeneracional y como licenciada en Letras investigué las escrituras del yo: autobiobiografías, memorias, diarios. En los personajes de la historia aparecían datos increíbles que se podían constatar en las repeticiones de traumas, en las fechas coincidentes, en los acontecimientos significativos de sus vidas. Reunir mi propia biografía, con la psicogenealogía, los casos de pacientes y los datos de la historia universal fue un maravilloso material para escribir estas experiencias.

P. En Secretos familiares nos explicas desde la psicología transgeneracional cómo podemos -a partir del conocimiento de nuestro pasado familiar- vivir y aceptar nuestro futuro. ¿Qué es la psicología transgeneracional?
R. Es una línea terapéutica que se centra en despejar las ramas que ocultan lazos, secretos, vínculos y dolencias de un clan, de un árbol genealógico. Así como Freud nos advirtió que el sujeto es consciente más inconsciente personal, la psicogenealogía nos brinda las herramientas para conocer el inconsciente “de la tribu”. Toda familia maneja una serie de creencias, mandatos, y saberes no dichos que afectan la salud y el comportamiento de sus descendientes. Activar la memoria, desentrañar fechas falsas o nombres reiterados a lo largo de las generaciones facilita la toma de conciencia y nos libera de cargar los conflictos inacabados de los ancestros. Soltar las mochilas con decretos familiares es la vía de acceso a un conocimiento profundo de nuestra subjetividad.

P. ¿Cómo podemos aplicar la psicología transgeneracional a nuestra vida y cómo nos puede ayudar en nuestra vida diaria?
R. Ver, oír y hablar. Preguntar e indagar. Hacer cuentas y verificar en documentos y partidas de nacimiento: toda familia guarda secretos y esa potencia callada se perpetúa y enferma. Saber que plantear límites a la indefensión aprendida, que no somos rehenes de una matriarca resentida o del poder despótico del patriarca; que podemos torcer las expectativas de los mayores y decidir nuestra vocación de médico aunque en mi familia sean todos músicos… Nuestra vida es el mapa de los caminos que nos marcan y de las nuevas rutas que inauguramos con la plena libertad de elegir a conciencia y no por aceptación del mandato impuesto.

P. En el libro aparecen historias que sirven de ejemplo para ver cómo nos pueden afectar “nuestro secretos familiares, ¿cómo te documentaste?
R. Ser especialista en literatura me ofreció una plataforma de oro para analizar personajes de ficción y personas de la historia en las diferentes épocas. Las biografías como género literario ofrecen llaves maestras para revisar criterios de repeticiones tóxicas. Sabemos que hasta que alguien en el clan no se haga cargo de una verdad oculta, el inconsciente repetirá una y otra vez el trauma ancestral; hasta que no se tome conciencia, las dolencias físicas y emocionales, los fracasos profesionales, y los vínculos inestables se perpetuarán en los descendientes de la familia. Estudiando la vida del rey Guillermo de Holanda y la de sus padres y abuelos salta un dato muy valioso de mandato: las bodas, el amor, están cruzados por algo del orden de la violencia de Estado (el nazismo en la época de la reina Beatriz, la dictadura militar argentina en la elección de Máxima como objeto amoroso). ¿Dónde documentarse? En todos los archivos, partidas de nacimiento, de defunción, certificados de bodas y divorcios, división de bienes, escrituras de propiedades inmuebles, en cementerios, cárceles, hospitales. Los registros de inmigrantes (la Argentina fue receptora de todos nuestros abuelos italianos, españoles, árabes, judíos, armenios a fines del siglo XIX y principios del XX), los acontecimientos de contexto, las celebraciones, las tradiciones. Todo aporta información. El secreto está en animarse a ver y relacionar acontecimientos: ahí anida un saber no dicho que aguarda ser revelado.

P. Todos sentimos en algún momento que tenemos angustias y problemas que no sabemos cómo cargar con ellas, ¿qué es lo que propones en tu libro?
R. Propongo decidir cortar con las falsas fidelidades a un familiar que nos hizo “firmar” con sangre pactos desparejos, no expresados, silenciados en sus motivaciones. La falsa lealtad impide crecer como sujeto libre. Desde la psicogenealogía afirmamos –con nutrida evidencia de casos clínicos- que nacer detrás de la muerte de otro hijo que no sobrevivió o que fue abortado implica vivir con el peso del hermano muerto, si se oculta el hecho, si en el recuento de hijos “se saltean” los no nacidos, su fantasma habitará como zombie en la vida de otro miembro del grupo. Es lo que se conoce como síndrome del yaciente. A veces las angustias se relacionan con los traumas de exilio, guerras o violencia doméstica sufrida por algún miembro del clan con el cual “hacemos eco” (por nombre, fecha de nacimiento, orden en el nacimiento). Cuando sentimos que somos los herederos universales de aquello irresuelto por mis abuelos o bisabuelos llevaremos una vida parasitaria a una historia ajena. Liberar esas amarras nos devuelve la autonomía y la posibilidad de una vida más libre.

P. ¿Cuáles son tus planes de futuro? ¿Vas escribir otro libro sobre este tema?
R. Sigo investigando y cruzando saberes de otras disciplinas como la biodecodificación y la epigenética, la biología de las creencias y la fuerza de los arquetipos. Mis pacientes me aportan una gran cantera de conocimientos, el intercambio con los colegas y la formación permanente son mis pilares para el trabajo de clínica e investigación. Mi siguiente libro ya lo tiene la editorial y estará a disposición del público en abril 2016. Es una profundización de Secretos… Se centra en los personajes que asumimos en la vida para complacer a los mayores, para no defraudar sus expectativas y cumplir los mandatos transgeneracionales. Aprender a decodificar las raíces de nuestros árboles nos permite ver con claridad el personaje que ensayamos, nos alivia el peso de cargar con una identidad débil. Eso colabora con una mirada más clara sobre el futuro y nos habilita a vivir con más conciencia y plenitud.

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