www.todoliteratura.es

Editorial Leviatán

22/11/2023@05:05:00

Como quien exhibe en una feria de atracciones un fenómeno extraordinario, Rolando Revagliatti abre la cortina, en este libro, a una realidad cruel y fascinante. Una posible conjetura se insinúa desde el principio: nada es más cruel y fascinante que la existencia. Mirada desde cualquier ángulo, la presencia, la proliferación, el comportamiento de los seres y las cosas, no resiste una prueba de justificación, de sentido suficiente. Por el contrario, es materia de perplejidad, estupor y consecuente sarcasmo. A partir de allí, todo será motivo de asombro. Pase y vea.

Hace algún tiempo leí un ensayo —que se presentaba como un diálogo entre dos eruditos contertulios— cuyo título, Nadie acabará con los libros, zanjaba, casi pendencieramente, un debate que durante décadas ocupó un lugar central en los ámbitos consagrados a eso que, con proverbial munificencia, hemos dado en llamar cultura. Los contertulios no eran otros que Umberto Eco y Jean-Claude Carrière, y el tema sobre el cual se debatía (aunque sería más apropiado decir se conversaba), como podrá deducirse, no era otro que el futuro del libro impreso ante el avance de los soportes multimedia de lectura. Pero ¿qué tiene que ver esto con el poeta Rolando Revagliatti? En realidad, no demasiado. Sin embargo, la sutil conexión que puede vislumbrarse es de por sí reveladora.

La autora argentina responde ‘En cuestión: un cuestionario’ de Rolando Revagliatti

Claudia Schvartz nació el 3 de diciembre de 1952 en Buenos Aires, donde reside, capital de la República Argentina. Es dramaturga y actriz (interpretó monólogos teatrales de su autoría). Publicó el volumen de cuentos para niños “Xímbala” (1984), el de ensayo “Miyó Vestrini o el encierro del espejo” (2002, Editorial Blanca Elena Pantin, en Venezuela), y otro con prosas, “El papel y su futuro” (2015). En 2018 apareció su nouvelle “Nimia”. Poemarios editados: “La vida misma” (1987), “Pampa argentino” (1989), “Tránsito es nombre” (2005), “Ávido don” (2008; Mención del Premio Nacional de Literatura 2001), “Eólicas” (2011) y “Alcanfor” (2018). “Ávido don” fue traducido al francés en Quebec, Canadá (2015, Éditions de la Grenouillère) y al portugués (2016, Poética Edicioes). Tradujo, entre otros, “Sonetos y elegías” de Louise Labé, “Cementerios: la rabia muda” de Denise Desautels, “La libertad del espíritu” (textos de Paul Valéry y Antonin Artaud), “Tú, mi único” (antología de poesía femenina provenzal). Citamos, de los diversos volúmenes que compiló, “Antología de la poesía erótica” y “Nueva antología del amor”.

  • 1

A propósito de INFAMÉLICA, poemario por Rolando Revagliatti (Editorial Leviatán, Buenos Aires, 98 páginas, 2022)

A mediados del S. XX algunos muchachos aprendimos qué es orbitar, qué sería un satélite y qué es lo artificial. Y algunos otros muchachos aprendieron psicología. La mujer ya estaba alta ante nuestro deseo, una mitológica Luna irresistible para nuestra cohetería en ciernes.