Este año, nuestra novela preferida ha sido “La estirpe del águila”, del escritor turolense afincado en Valencia, Sebastián Roa. Un autor especialista en temas fronterizos de la Baja Edad Media sobre la Reconquista cristiana de la península ibérica. En la novela se mezcla la historia, muy rigurosamente documentada, con la leyenda. La creación de los reinos de Aragón y Castilla y sus relaciones con el de Navarra es el eje vertebrador de la novela donde no faltan rencillas familiares y ambiciones política. Escrita con un sentido épico y dramático de la literatura, no faltan historias de amor prohibidas, batallas campales, juramentos no cumplidos y, sobre todo, la venganza. Una novela histórica de lectura obligada en este 2025.
La segunda posición es para Alfonso Goizueta y “El sueño de Troya”, donde conduce al lector a las excavaciones de Troya de la mano de su descubridor, Heinrich Schliemann. Aunque el verdadero protagonista de la historia es el joven griego Nicholas Yannikis, que cuenta, en primera persona, las andanzas del polémico empresario-arqueólogo. Los límites entre verdad y ficción están a propósito entrelazado”, entre los personajes ficticios y reales en su obra. Esta mezcla refleja el engaño presente en la historia del descubrimiento de Troya, donde “las mentiras y la realidad conviven”. Realmente fueron ocho Troyas las que encontraron y muchos de los descubrimientos no quedaron totalmente claros, nos contó el escritor madrileño. Goizueta ha sabido evolucionar de manera realmente interesante desde que consiguió ser finalista del Premio Planeta de Novela 2023.
En tercer lugar, nos encontramos con “Cerbantes. El combate de las letras”, del expolítico y sociólogo Álvaro Espina. Con esta obra, cierra la trilogía sobre Miguel de Cervantes. Arranca con la vuelta de Miguel desde Lisboa a Salamanca, donde participa en la academia de la universidad salmantina y descubriremos cómo el escritor alcalaíno pergaña su novela de “El Quijote”. La novela es infinitamente superior a los últimos ensayos que se han publicado sobre Cervantes.
Una lectura muy recomendable, es la novela que situamos en cuarta posición, “Pelayo”, de José Soto Chica. El prolífico escritor granadino, en esta nueva novela recupera a uno de los personajes históricos españoles más icónicos. La resistencia que dio vida a un reino y forjó una leyenda. Su lectura es tremendamente veloz, sin dar tregua al lector. Soto Chica desentraña enigmas de su vida y maledicencias de su gesta. Él deja la historia en su sitio y la leyenda a un lado para construir un personaje fundamental en nuestra trayectoria.
El quinto puesto es para “Guerreros de invierno”, del escritor francés Olivier Norek. Se desarrolla en Finlandia al comienzo de la Segunda Guerra Mundial. Es una novela poderosa y profundamente conmovedora en la que se entrelazan el drama humano, la épica bélica y la creación de una leyenda con el hielo más hostil y la intensa fuerza de la voluntad humana. No se trata únicamente de un relato bélico, sino de la historia que narra lo que sucede cuando el espíritu de un pueblo entero opta por no rendirse. Los guerreros del invierno representan esa lucha.
La sexta posición es para “Ojos de Bruna”, de la escritora extremeña Inma Chacón, una autora todo sensibilidad y elegancia que, en esta ocasión, consigue una novela histórica cautivadora. Secretos, emoción y suspense en una saga de la España rural del siglo XIX. El silencio y la mentira parecen ser comunes entre todos. No obstante, hay un aspecto que resulta evidente: la relación entre un padre y su hija, y que no está dispuesto a colaborar en una investigación de la Guardia Civil. Intriga y emoción a partes iguales.
El séptimo lugar es para otra novela sobre la Segunda Guerra Mundial, “Colina 112”, del especialista en historia militar Adrian Goldsworthy. La novela narra las vicisitudes de tres jóvenes galeses preparándose para la batalla en Normandía. A pesar de su juventud, se enfrentaron a uno de los episodios más brutales del conflicto. El 6 de junio de 1944 cambiará sus vidas para siempre, dejando cicatrices imborrables a estos hombres que no dejaban de ser niños pese a todo lo vivido.
La octava posición es para "Bocanegra", de Ignasi Serrahima. La novela transcurre en el interior de Cataluña, en 1618. La protagonista es María Querol, heredera de casas nobles, que rechaza al hijo del duque de Cardona y se convierte en la líder de bandoleros tras perderlo todo. Conocida como Bocanegra, lucha por la justicia en un Europa al borde del conflicto, desafiando al conde-duque de Olivares y convirtiéndose en una figura legendaria. Una narración llena de contrastes y escrita con tanto brío, que nos seduce hasta la última página.
No podía faltar en esta lista la inigualable Luz Gabás, en novena posición. Con “Corazón de oro”, se adentra en un contexto histórico fascinante que gira en torno a la fiebre del oro, un fenómeno que ha marcado la historia de muchos países y que ha sido fuente de tantos anhelos como tragedias. También de la colonización de una California recién absorbida por los Estados Unidos. Otros acontecimientos que trata son la Guerra de Secesión y el esclavismo que la produjo. La autora lleva a los lectores a un viaje a través de épocas y lugares donde la búsqueda de riqueza y fortuna se entrelaza con las historias personales de sus personajes.
Finalizamos el listado con “Alí Bey”, de Antonio Torremocha, que rescata, en esta novela la figura histórica de Domingo Badía y Leblich, un ilustrado español del siglo XIX. Este personaje llevó al extremo el arte del disfraz y la diplomacia al convertirse en Alí Bey el Abbassí, un pretendido príncipe musulmán que gozaba de acceso privilegiado a los centros de poder del mundo islámico. La historia se inicia cuando Manuel Godoy es convencido por Badía para que financie una expedición científica hacia Marruecos. Sin embargo, detrás de esa fachada académica se esconde una misión de carácter político. Una novela intrigante de un personaje aún más urdidor.
- “La estirpe del águila”, de Sebastián Roa
- “El sueño de Troya”, de Alfonso Goizueta
- “Cerbantes. El combate de las letras”, de Álvaro Espina
- “Pelayo”, de José Soto Chica
- “Guerreros de invierno”, de Olivier Norek
- “Ojos de Bruna”, de Inma Chacón
- “Colina 112”, de Adrian Goldsworthy
- "Bocanegra", de Ignasi Serrahima
- “Corazón de oro”, de Luz Gabás
- “Alí Bey”, de Antonio Torremocha