Se nota que el escritor y ex ministro de Cultura no es rencoroso. Fue el cabeza de turco del primer Gobierno de Sánchez y dimitió por un presunto fraude fiscal de poca monta. Total, un quítame allá esas pajas (En sentido subliminal y sin entrar en detalles). Tampoco nos vamos a poner estupendos con la de mangantes que andan sueltos.
Este preludio nos sirve para indagar acerca del amor. Amor, la palabra más repetida y el sentimiento más prostituido. También el más equívoco, versátil y difuso. Si hablamos de amor de madre, Tita Thyssen acaba de desheredar a su vástago. O de amor de hombre y Federico ha vendido a Genoveva por una corona. Amor de verano, amor a primera vista, ya sabes, duran lo que dura dura. Por supuesto, sin olvidar el amor a la patria, que es el amor más incomprendido, como bien sabe Miriam Nogueras, la portavoz de Junts. De este amor no te puedo hablar, porque nunca he vivido esa pasión. Mi patria soy yo, que diría Luis XIV. Pero escucha Nogueras, te sugiero que conserves esa utopía en tu corazón. Relativiza, inspira, exhala, disimula, estira el chicle. Más te vale el pájaro en mano de tu sueldo de diputada, que contigo pan y calçolts. No seas tan romántica. El único amor que dura toda la vida es el amor propio. Oscar Wilde, dixit.
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