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XLIIIº Premio Mundial Fernando Rielo de Poesía Mística

23/12/2023@16:16:00
La proclamación de la obra ganadora ha tenido lugar en acto público desarrollado en el Aula Magna de la Universidad Pontificia de Salamanca, el viernes 15 de diciembre, organizado conjuntamente por la Fundación Fernando Rielo y la Cátedra Fernando Rielo de esta misma Universidad.

El periodista y escritor Alfonso Domingo ganó el XLIII Premio de Novela Ateneo de Sevilla con su novela "El Espejo Negro. Versa sobre una supuesta obra del pintor flamenco Hieronymus van Aeken, más conocido como “El Bosco” y del que muchas de sus grandes obras podemos ver en el Museo del Prado. La novela ha sido publicada por la editorial sevillana Algaida.

Con "Los que alcanzan la orilla", la escritora madrileña Paula Lapido se hizo con el premio de novela de los XLIII Premios Literarios Kutxa Ciudad de Irún, una historia actual con un sólida trama de misterio.

Ya sólo encuentro sosiego y goce en los clásicos latinos y griegos, en la "Biblia de Jerusalén" y en los clásicos castellanos. Ciertamente me place más Calderón de la Barca, queridísimo en Alemania, que Lope de Vega, más gustado en países como Francia y España, donde nació. También soy aficionado a los intrincados axiomas y conceptos de Kant, que a pesar de ser difíciles de intelegir, "enseñan a pensar", como dice mi maestro el doctor Óscar Villarreal Reyna, teólogo, pedagogo y ensayista al que debo mi sólida formación filosófica.

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Algaida Editores (Sevilla, España)

Un jurado integrado por los poetas españoles Antonio Colinas, Raquel Lanseros y Manuel Rico le otorgó en 2019 el XLIII Premio Literario Kutxa Ciudad de Irún al poemario “Mauritania es un país con nieve”, del argentino Carlos Juárez Aldazábal, publicado en noviembre de ese mismo año por Algaida Editores.

La lengua, dicen los académicos, que son contempladores del léxico, es un “maravilloso artificio” (Nueva gramática, XLI). Es labor artística porque crea “mundos nuevos”, según un poema de Huidobro, y es maravilla porque muestra a los sentidos y al entendimiento lo que por sí mismos no pueden captar, pues son constantemente embotados por las “preocupaciones de la vida” (Lucas 21: 34), como nos advierte Jesús.