www.todoliteratura.es

“La Casa”, de Fernando Rueda

La Casa
La Casa

En 1993 la editorial Temas de Hoy publicó el libro de Fernando RuedaLa Casa”, ahora 25 años después una editorial de segunda fila la reedita. Ha pasado un cuarto de siglo; pero el periodista y autor del libro no ha modificado en nada el libro. Un craso error porque desde aquellos años la materia de espionaje ha cambiado sensiblemente y el autor parece que no se ha enterado.

Cuando se publicó la primera edición de esta obra, se vendió como un libro valiente. El primero que se atrevía a desvelar los misterios del entonces CESID, que fue fundado el 14 de julio de 1997 por el teniente general Gutiérrez Mellado y firmaron su acta de defunción el 6 de mayor de 2002, bajo las órdenes de Jorge Dezcállar. Han pasado los años, pero ni el servicio de información ha mejorado en exceso ni los periodistas que cubren este tipo de hechos se han enterado de lo que realmente ocurre en esa Casa. Es más, creo que ni ellos mismo se enteran, más preocupados por agradar a los gerifaltes de turno.

La Casa, así llamaban al CESID sus miembros y los periodistas, un nombre demasiado pretencioso. Lo que tenía que ser un lugar común al servicio de España, se convirtió desde un primer momento en un lugar manipulado por las fuerzas políticas de uno y otro signo. Han sido más los fracasos que los aciertos y así lo relata Fernando Rueda. El periodista mantiene muchos vínculos con algunos de sus miembros, pero no es nada querido por esa casa.

Uno de los miembros del Club Le Carré, compuesto por escritores y especialistas que estudian todos los temas que hacen referencia al espionaje y, por supuesto, al que pertenece algún espía jubilado, me decía que no han invitado a Fernando Rueda al club porque si no el CNI les retiraría su apoyo. No entendía a qué apoyo se refería. Es evidente que Rueda es el mayor especialista en el espionaje español actual, a años luz de Domingo Pastor Petit, lo que no quiere decir que realice un trabajo interesante.

Cuando empecé a leer “La Casa” creía que me iba a encontrar con un libro sobre la historia de esa institución. Mi decepción fue mayúscula porque me encontré con una serie de obviedades y de cotilleos que estaban muy lejos de un trabajo serio. Casi todo se centra en los años 1989, 1990, 1991 y 1992. Da unas pinceladas de su historia anterior, pero no entra a mostrar la estructura del CESID, solo da unos brochazos gruesos que no llegan a atrapar a los lectores.

Además, su estructura es caótica y sin ninguna garra narrativa. Va saltando de un caso a otro de tal forma que la lectura queda bastante embarullada. En casi ningún momento consigue atraer la atención del lector. Es verdad que sus fuentes son de segunda fila porque los jefes del servicio nunca hablarían. Es más, un buen espía solo dice obviedades y nunca desvela nada interesante. Por eso, es mejor leer una novela de espías o un libro publicado en el extranjero que lo suelen hacer muchísimo más interesante.

Puedes comprar el libro en:

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (1)    No(0)

+
0 comentarios