"Libertad, pluralidad, respeto y tolerancia".
«Considero este festival un refugio para el espíritu; mientras afuera predominan los antagonismos y la polarización, aquí honraremos la tolerancia, el respeto, la pluralidad y la defensa de la libertad», expresó Álvaro Vargas Llosa. Recordó también la presencia «fantasmagórica» de su padre —«preguntará por los pasillos quién va a ganar»— y compartió un recuerdo personal de sus últimos días: «Me acordaba del ritmo, no de las palabras».
Cáceres y Extremadura, conexión con América.
Rafael Mateos Pizarro, el alcalde de la capital, destacó que «Cáceres es cultura con argumentos sólidos» y expresó su agradecimiento por la elección de la ciudad como sede de la Bienal en su primera llegada a Europa. En sus palabras, mencionó: «Cáceres es un puente real y sólido entre España y América… nuestros lazos están vivos y nos impulsan a crecer de la mano». Además, vinculó el evento con la meta de Cáceres 2031, afirmando: «Un paseo por la ciudad monumental es pura poesía; la colección del Museo Helga de Alvear, pura inspiración».
Victoria Bazaga, consejera de Cultura, Turismo, Jóvenes y Deportes, dio la bienvenida «a Europa por la puerta de Extremadura» y destacó la estrategia “Extremestiza”: «Somos mestizos y estamos muy orgullosos. La cultura es el vehículo que tiene la sociedad para ser libre». Además, anunció cerca de 30 experiencias literarias accesibles a todos los ciudadanos y recordó los importantes hitos culturales que conmemora la región.
El homenaje a Vargas Llosa y el diálogo entre los finalistas.
La charla «más emocionante e intensa» de la Bienal fue conducida por Raúl Tola, director de la Cátedra, junto a los seis finalistas: Gioconda Belli, Gustavo Faverón, Ignacio Martínez de Pisón, Pola Oloixarac, David Uclés y Sergio Ramírez.
Gioconda Belli, en su obra "Un silencio lleno de murmullos", expresa: «No es lo mismo la vida para una mujer que para un hombre… esa diferencia atraviesa el libro».
Gustavo Faverón (Minimosca) comentó: «Escribí historias desconectadas sobre relaciones extrañas en familias extrañas, y la novela resultó ser más geopolítica de lo que había planeado».
Ignacio Martínez de Pisón, en su obra "Castillos de fuego", afirma: «Para entender la transición hay que entender el franquismo y la guerra; la posguerra sigue poco narrada».
Pola Oloixarac (Bad Hombre) afirma: «Trabajo con historias reales; la revolución de las mujeres es la más importante de nuestra época y mi libro es feminista».
A través de un vídeo, Sergio Ramírez (El caballo dorado) expresó: «Escribo para divertirme; este libro es un homenaje a la imaginación y a la libertad de escribir».
David Uclés, en su obra "La península de las casas vacías", expresa: «Quise contar la Guerra Civil en clave de realismo mágico, como un fotógrafo: con objetividad».
El tributo escénico titulado “Mario, un pez en el agua”, bajo la dirección de Edu Galán, entrelazó la memoria y la obra del Nobel con la colaboración de Ana Belén, Ángeles Mastretta, Magüi Mira, Ayanta Barilli, Juan Cruz, Juan Gabriel Vásquez y Raúl Tola. Además, se incluyeron intervenciones grabadas de Joaquín Sabina y Aitana Sánchez-Gijón.
El premio: 100.000 dólares y seis obras en competenci
El VI Premio Bienal de Novela Mario Vargas Llosa, dotado con 100.000 dólares, reconoce la mejor novela en español publicada en los dos últimos años. Optan:
- David Uclés, La península de las casas vacías (España)
- Ignacio Martínez de Pisón, Castillos de fuego (España)
- Gustavo Faverón, Minimosca (Perú)
- Pola Oloixarac, Bad Hombre (Argentina)
- Sergio Ramírez, El caballo dorado (Nicaragua)
- Gioconda Belli, Un silencio lleno de murmullos (Nicaragua)
La gala y el fallo del jurado serán este sábado, 25 de octubre, de nuevo en el Gran Teatro de Cáceres. Desde su creación en 2014, el premio ha recibido más de 2.500 novelas provenientes de España y América Latina.
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