www.todoliteratura.es

"En La Habana nunca hace frío", de Zoé Valdés, el rock cubano con sangre entra

Por Evaristo Aguado
domingo 22 de octubre de 2023, 08:38h
En La Habana nunca hace frío
En La Habana nunca hace frío

Tras publicar este mismo año La intensa vida, una suerte de memorias en las que la escritora mostraba recuerdos amargos y pasados también dulces, Berenice edita la nueva novela de Zoé Valdés, "En La Habana nunca hace frío", que vuelve a 1972 en la isla, un lugar en el que el rock no está bien visto, sobre todo si se canta en inglés “la lengua del diablo”.

Son los años setenta y Cuba no es ajena a la música que se hace fuera, en Europa y Estados Unidos. Un grupo de chavales, muy jóvenes algunos, sueñan con vivir otra vida, con respirar otro aire y dejarse llevar por las letras de viejos y nuevos rockeros, como los Rolling Stones, un grupo prohibido, o Marianne Faithfull, letras que hablan de amor, de esperas, de atardeceres, de futuro.

Eva/Flower/Lilitú, que es la narradora, Pilzy y Bada forman un trío de amigas que merodean por el underground cubano, se dejan ver en festivales y quieren formar parte del movimiento hippie, la Jipangá que llaman allí, una fuerza liberadora que las llevará a experimentar todo tipo de sensaciones, desde el placer de creer en una libertad que es mero espejismo hasta la crueldad más absoluta vestida de color caqui, la temible fuerza represora del régimen.

Por sus páginas desfilan Mijito Frankenstein y su hermana, Charlie Tellier, Saúl, que tanto prometía, Los Almas Trepidantes, Kent, Taxon, Nomos, Dada, Los Bada, las llamadas fiestas de perchero, locales como el Patria o Muerte, los días eternos en la cárcel-hospital y el deseo de poder escapar algún día para poder contemplar otro cielo.

Zoé Valdés nació el 2 de mayo de 1959. Es, dice, tan despistada como lo fue su madre. Ha conocido lo que es el hambre de no tener. Escritora de poesía, novela y guiones cinematográficos ingresó en la Facultad de Filología de la Universidad de La Habana, y entre 1984 y 1988 formó parte de la Delegación de Cuba ante la Unesco en París. Tras regresar, comenzó a ganarse la vida como guionista y luego fue subdirectora de la revista Cine Cubano. En 1995, invitada a unas jornadas sobre José Martí en París, pidió asilo político. Sangre azul fue su primera novela, género que más ha cultivado, aunque sin abandonar la lírica; ha editado también literatura infantil.

Entre sus galardones destacan el Fernando Lara de Novela por Lobas de mar y el Azorín por La mujer que llora. Ha sido tres veces finalista al Médicis Extranjero en Francia, y ha sido asimismo finalista del Premio Planeta con "Te di la vida entera".

Fue redactora jefe de la revista de arte ARS Magazine (EE.UU.) y colabora en medios como El País, El Mundo, El Semanal, Qué leer, Elle, Vogue, Le Monde, Libération, Le Nouvel Observateur o El Universal de Caracas. Ha codirigido un cortometraje, Caricias de Oshún, y ha sido miembro del Gran Jurado del Festival de Cannes. Su obra ha sido traducida a numerosos idiomas. Sus últimas obras son: "La casa del placer", "La noche al revés" y "Pájaro lindo de madrugá".

Puedes comprar el libro en:

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios