AMARTE ES UN TRABAJO SUCIO (pero alguien tiene que hacerlo): Esto es lo que hay

Por Alberto Morate

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viernes 21 de abril de 2023, 22:02h

A veces creo que no nos estamos dando cuenta de cómo va cambiando la sociedad, las relaciones entre personas, los contratos laborales, la forma de enfrentarse al mundo.

Cada vez todo es más una montaña hecha de residuos, donde, para acallar la boca de los ciudadanos, posteriormente se levanta un parque. Damos por sentadas ciertas transacciones que, a la larga, se van convirtiendo en explotación obrera, emocional, religiosa, política, económica.

Es como si pisáramos el fango o el asfalto se derritiera y no podemos dar pasos firmes.

En Amarte es un trabajo sucio (pero alguien tiene que hacerlo), con dramaturgia y dirección de Iñigo Guardamino, este nos plantea algunas de las premisas antes mencionadas. Es verdad que la pandemia desestabilizó puestos de trabajo, personas y relaciones humanas. Y, siempre, en nuestra conciencia, queda la idea de que hay que seguir levantándose, que hay aceptar lo que nos ofrecen, que ya vendrán tiempos mejores, que cuanto más te adaptes al sistema más éxito y valor tendrás, que cada uno debe cargar con sus demonios.

Así, nos venden humo, nos hacen tragar con ruedas de molino, algunos se agarran como clavo ardiendo a una salvación espiritual, otros no se comprometen a nada, por si acaso, y los que ahora están arriba, ya caerán, o subirán más alto, y los que están abajo, por alguna oscura razón, siempre se mantienen abajo. Aunque nos llenen de metáforas y versos sueltos, imbuidos en una competición que no todos soportan, asumiendo riesgos laborales, (ya te lo había dicho), que nos llevarán a humillarnos en situaciones descompensadas.

Y con las relaciones personales y sentimentales, viene a pasar "un poco algo más" de lo mismo. A la mínima, te quiero pero no del todo, te comprendo, pero entiéndeme tú a mí, te jodes si no has estado espabilado antes, quiero ser honesto, pero me lo ponen muy difícil.

Alex Villazán asume el rol del chico al que le dicen esto es lo que hay, las protestas cuando estés en tu tiempo libre, no me hagas repetirlo, que pierdes tu condición de asalariado, es que estás totalmente perdido.

Belén Ponce de León, José Emilio Vera y Katia Borlado, asumen diferentes roles, donde están retratados esos perfiles de madre, padre, novia, compañeros, jefes, iluminados con el foco fundido, (es un decir). Porque ellos están magníficos.

Ya nadie nace con un pan debajo del brazo, como se decía antes, y nunca ha habido libro de instrucciones para saber cómo uno debe de comportarse en esta sociedad que ensalza el trabajo, pero no lo encuentra, que valora el tiempo libre, pero no sabe cómo gastarlo, que cuantos más vacíos estamos más de cosas nos llenamos.

Muchas son las tesituras que se vierten en este montaje, con estos personajes, con estas situaciones y, como somos así, cada uno lo verá de una manera diferente, afortunadamente, aunque todos estamos de acuerdo en que no son buenos tiempos para los jóvenes y para los talludos, porque hay mucho león en la arena, poco gladiador y pocas vías de escape.

Amarte es un trabajo sucio, porque todo se convierte en interés, y hay veces que no se ven venir los palos, las envidias, la competición, y cuando quieres darte cuenta, ya estás pringado.